Una imagen rara, encontrada por algún foro que no recuerdo, de un OT-26 fuera de combate y bastante bien conservado, al menos lo que se ve del vehículo. Al fondo se divisan bosques y una columna alemana de camiones (se ve claramente un Opel Blitz) transitando un camino embarrado, el mismo barro que se aprecia en las ruedas del carro ruso. Alguien debió bajarse de uno de los camiones a echar un pis y hacer de paso una foto como recuerdo.
Lo raro del asunto es la instalación del lanzallamas en la torre. Se conoce que a falta de piezas, repuestos, tiempo o de todo a la vez, decidieron practicar un simple agujero en la torre y acomodarlo mediante un tope remachado en lugar de instalarlo, que era lo fetén, en el antiguo mantelete de la ametralladora. La tesis de la improvisada urgencia parece apoyarla también el faro de camión que lleva el carro.
Estos diagramas muestran la disposición del lanzallamas en el interior del T-26. Se me hace difícil imaginar cómo diablos pretendían apuntarlo y dispararlo desde el interior desde esa posición, ya que las mirillas de visión estaban situadas en el mantelete de la torre. ¿Apuntarían a ojímetro?. Por otra parte el poco espacio interior de la torreta se vería reducido aún más con la empuñadura del arma situada más atrás. Quizá por eso los tripulantes salieran por patas a las primeras de cambio, ¿a dónde iban a ir con semejante martingala?.
Esta otra imagen me era igualmente desconocida, pero tiene menos de rara. El ambiente en esta ocasión es el contrario, seco y polvoriento (¿verano 1941?). Dos tripulantes caídos, seguramente cazados como pajaritos (cochina guerra), y al fondo se adivinan otros carros. El carro ha ardido hasta las trancas, no hay más que ver la blanquecina ceniza del caucho de las ruedas de los carretones y la pintura levantada que ha dejado a la vista incluso el metal en el mantelete. Lo raro es la estrella roja, quizá amarilla, de la torreta que presumiblemente también llevaría en el otro lado. Por lo demás, sin novedad en el infierno.♦